Me resulta muy interesante comentar sobre un artículo resumen del libro The Power of Impossible de Jerry Wind donde nos habla este gurú del Marketing de como estos afectan y establecen límites y barreras que normalmente uno se pone en la vida; dice “En definitiva, somos víctimas de unos modelos mentales rígidos y estrechos que solamente revisamos cuando nos vemos obligados a hacerlo “
Mi reflexión la podemos ver en dos dimensiones.
a) Limites mentales y como afectan la creatividad.
Estimo que la creatividad es connatural al ser humano; por lo tanto existe una gama infinita de creatividades, tanto como seres humanos. Sin embargo las mejores ideas fracasan, las estrategias brillantes no se traducen en hechos. El paso de la idea a la realidad, tiene que lidiar con nuestros modelos mentales; aquellas imágenes, supuestos, historias, que llevamos en la mente acerca de nosotros y de los demás, de las instituciones y de todos los aspectos de nuestra relación con nuestro entorno.
Estos son nuestros límites y barreras mentales que nos encadenan. Todos tenemos sueños que deseamos y nos gustaría cumplir; pero la mayoría de las veces esa fuerza creativa es neutralizada por los modelos mentales individuales y colectivos. Creo que sólo con el avance en el conocimiento personal, conjuntamente con humildad, se logrará comprender en poder de la mente.
b) Mirando a los modelos mentales con otra perspectiva. ¿Podrá ser la del futuro?
Siguiendo el consejo del artículo, que nos indica: “No comprendemos que si logramos observar al mundo desde otra perspectiva, se abrirá ante nosotros nuevas posibilidades”; pues bien, hagamos el ejercicio precisamente con los modelos mentales.
Pensemos por un momento en los modelos mentales desde otra óptica, podríamos llegar a una paradoja en la capacidad creativa del ser humano.
Los modelos mentales tal como se concluye en el artículo aportan una interpretación individual y subjetiva. Es más, podríamos decir que cada uno de nosotros afecta a lo que ve, por eso, es que son tan poderosos los modelos mentales; sin embargo esta relación sistémica con ellos, nos permite a cada uno de nosotros una fuente de creatividad. Planteado de otra forma ¿cómo nacería la creatividad si todos nosotros tuviéramos la misma e idéntica interpretación subjetiva ante las cosas del entorno que nos rodea?; la creatividad emerge de la diferencia, de los contrates, a veces muy sutil, de la percepción, del desorden, en el fondo del caos.
Varias personas con sus diferentes modelos mentales pueden observar el mismo acontecimiento y describirlo de manera distinta porque han observado detalles disímiles. De esa observación, brotan ideas, sueños y visiones diferentes que resultan en creatividad pura. Si no fuera así, ¿no pasaríamos a ser más maquinas que seres humanos?
Resulta interesante recapacitar cómo los modelos mentales, por un lado bloquean nuestra capacidad de concreción, y por el otro su dinámica determina una infinita capacidad creativa en nosotros. ¿Entonces, qué papel juegan los modelos mentales en la evolución de nuestra especie? Pueden parecer simples generalizaciones, pero en realidad modelan nuestros actos y nos permiten soñar.
Eduardo Quezada Ibarra
